The Old King’s Crown

 

El viejo rey nos ha dejao, algunos dicen que murió plácidamente mientras dormía, rodeado del amor de súbditos y consejeros. Una hermosa despedida a un reinado benévolo y compasivo. Hay otros, sin embargo, que insisten en que fue el más avaro de los hombres y que la horrible enfermedad que le sobrevino fue un final apropiado. En otros lugares se oyen susurros de malas artes, de un cuchillo, o veneno o algo peor, a manos de uno de sus rivales o incluso de uno de sus parientes. Hay quienes incluso afirman que el viejo rey sigue vivo, que se ha ocultado en el extranjero por razones aún desconocidas, o que se le ha visto vagando por el brezal azotado por el viento, con los ojos desorbitados en la oscuridad.

Sea como fuere, el viejo rey se ha ido y la corona del reino lleva demasiado tiempo sin ser reclamada.

Los jugadores asumen el papel de uno de los herederos del rey, al frente de su propia facción. Aprovecharán su fuerza, astucia y el carisma de sus seguidores para intentar superar a sus rivales. A través de espías y agentes harán avanzar sus planes. Con máquinas de guerra, fintas y engaños intentarán hacerse con el control de lugares estratégicos. Lejos de los frentes, se envían partidarios a recorrer los antiguos caminos que entrelazan la tierra, buscando aliados, artefactos y lugares de importancia en este antiguo reino semienterrado. Cada heredero busca en última instancia lo mismo, acumular suficiente influencia y reclamar la Corona del Viejo Rey para sus propios fines.